Lo de mis hijas menores es genial. El miércoles terminaron el cole. Y ayer, observé a la de 13 años, vagando por su habitación, sin rumbo fijo y como perro sin amo.
Básicamente, tirando su tiempo por la ventana de la preadolescencia. 😂
Así que en un descuido, me planté en su cuarto y conversamos sobre:
«Hija, ¿qué vas a hacer en las próximas semanas para disfrutar, descansar, y en definitiva seguir progresando como ser humano?» (conste que ha sacado buenísimas notas)
Por si andaba con dificultad para encontrar hobbies, le listé 200 opciones de actividades lúdico festivas, por aire, mar y tierra. Y le aclaré que, lo de pulular cada día con el horizonte perdido…no way.
Le digo que se tome su tiempo para pensarlo, y me dice rápido:
«Papá, quiero dar clases de matemáticas»😳
Hoy viernes empieza (y paso palabra porque no entiendo nada)
A la mediana, le pregunté hace unos días si tenía ilusión por algo especial para el día de su cumple, que es hoy (17 años)
Y mirándome a los ojos, como si fuera a pedir un pedazo inalcanzable de la luna, me susurra con voz trémula:
«San Jacobos».
No entiendo nada. “¿San Jacobos?” pegunto.
«Sí, papá, me gustaría comer San Jacobos».
Viva la vida en Familia que es una caja preciosa de sorpresas 😀
Disfruta del día.