El amor como nexo para conseguir ser auténtico
La búsqueda de la autenticidad es lo que a mí me lleva a tener una vida exitosa. Del mismo modo, creo que el puente que une todas estas palabras (plenitud, libertad, éxito, felicidad) sea el amor. A algunos le sonará un poco cursi, cheesy como dicen aquí. Suena a pastelón, pero es así.
El origen de la palabra auténtico
He consultado definiciones sobre lo que significa ser auténtico. Me he encontrado que ser auténtico significa «parecer lo que se es». Su origen se remite, por supuesto, al latín y tiene que ver con ser original, no ser una imitación. Sin embargo, el verdadero origen de la palabra está en el griego authtikόs. Esta palabra habla del poder absoluto.
Los beneficios de ser una persona auténtica
A mí, estas definiciones me han hecho muchísimo sentido. Considero que cuando uno hace el ejercicio de ir buscando esa autenticidad, de ir desenmascarándose a uno mismo con muchísimo esfuerzo y sacrificio, haciendo una labor muy severa de introspección hasta encontrarse, hasta tocar el alma de uno mismo, sin duda uno se llega a encontrar. Se siente con un empoderamiento grande, con un dominio, con un control de su vida de lo más interesante. Cuando uno empieza a sentirse así, solo quiere seguir creciendo. Solo quiere seguir progresando en esa autenticidad que se ha descubierto.
Una pequeña anécdota sobre la autenticidad
Os cuento una anécdota. A mí, una vez, alguien aquí en Miami me dijo: «Ignacio eres la primera persona que me encuentro en Miami que eres lo que pareces.» En un primer momento, me quedé pensativo. No entendí bien lo que quería decir. Más tarde, compartí esta conversación con un amigo, que me dijo: “Igual le has parecido un gilipollas, o bien, le parecías un gilipollas y se lo has demostrado.” Igual sí, quien sabe.
Por eso, para mí, hoy ha cobrado sentido pensar que ser auténtico es parecer lo que se es. Eso es lo importante.
Disfruta del día.