Calcetines y grapadoras

6:30am. He abierto el cajón del armario y mis ojos no daban crédito. Tres tristes calcetines, sin su binomio, flotaban perdidos y desparejados en la soledad del cajón.Ni rastro de mis calcetines preferidos para correr. Entonces, he viajado hasta la adolescencia. A mis furtivas cacerías a los cajones donde se escondían los calcetines de mi padre. Aquello era calidad, droga dura. Tejidos de última generación. Nunca confesé esos prestamos unilaterales. Éramos muchos hermanos los que visitábamos los cajones de nuestro querido padre. Y vuelvo a las 6:30am -tener mujer e hijas deportistas, es lo que tiene- he pensado (en casa libramos una guerra abierta y silente por los calcetines Top) Me he sonreído y regresado a otra época en las que me birlaban ¨la grapadora¨ en la oficina. Comprábamos infinitas, pero el cosmos las desaparecía.

Recuerdo pegar un papel con ¨celo¨ en el que se leía mi nombre, antes incluso de que a alguno le apareciese la tentación de cogerla para no devolverla jamás. Los hurtos de oficina parece que tienen igual inocencia que cuando se te olvida devolver un libro a su dueño. El sentimiento de culpa está ausente. Ojalá al leer esto, los amigos que se distraen con material de oficina, dejen de hacerlo. Y mis chicas de mangar calcetines.

Si quieres estar al tanto de mis reflexiones, sígueme en estas redes:

Te puede interesar

Hoy comparto ilusionado con todos, este trabajo que he realizando en mi faceta de actor. Diría que es mi manera de ir haciendo
Los seres humanos cuando nos ponemos a crear belleza somos maravillosos. Disfrutemos de este sábado con este Mozart dance
Mamá y yo somos la gorra con la que hoy no te has querido proteger
Aprender a vivir desde el amor y para el amor en todos los dominios de nuestra vida.
Hay que estar muy pendiente de la brecha de la escucha, cuando hablamos con personas, para tener claro que la otra persona está entendiendo

¿Tienes una pregunta?

Si tienes interés en conocer mi opinión respecto de alguna pregunta de
ámbito profesional o personal que quieras hacerme, te ofrezco mi tiempo y
mi persona. Y desde luego, una respuesta, si la tengo.