Los humanos podemos vivir desprovistos de todos los sentidos con la excepción del “tacto”..
Y pienso ahora que no es casualidad que los seres humanos encontremos emociones en las caricias que hacemos o en las que recibimos, difíciles de explicar.
¡Y por cierto!, como he reclamado más de una vez ¡qué importante es también aprender a acariciar con las palabras!.
Al fin y al cabo, es otro manera de vivir la vida con “tacto”.
Disfruta del día