Últimamente en bodas, fiestas, y restaurantes, la escena se repite. Reparo en que alguien se me acerca por un ladito con sigilo, sin querer despertar sospechas. Como escondiéndose de la mirada de los otros para no ser visto. No sé, si en plan espía de la CIA o camello que vende estupefacientes.
De repente, noto como en tres tiempos, me agarra del hueso del codo, luego acerca su gesto a mi oido derecho y me sopla furtivamente y en voz baja- Que sepas Ignacio, que te leo todo lo que publicas. Me gustan mucho tus vídeos y lo que escribes,- y añade – aunque no hago comentarios ni doy a like.
Yo no entiendo bien por qué a algunos os da tanto apuro mostrar públicamente que os gusta lo que publico yo.
Una de mis cuñadas, me dijo anoche en la Bilbaína, en una boda de mi prima que: -les da vergüenza exponerse…porque te conocen-.
Yo no le entendí y sigo sin entenderlo ahora que he despertado y os escribo desde la casa de mi padre, tumbado en la cama (vagueando)…
¿Es por voyeurismo intelectual? ¿Timidez española? ¿Vasca?
¿Me lo quiere explicar alguien?
¡Disfrutad del día!