Mi trabajo me permite conocer a profesionales de ámbitos bien interesantes y variados. Y me siento muy agradecido porque puedo vivir experiencias inolvidables que no están al alcance de cualquiera. Me encanta aprender cosas nuevas.
Ayer por ejemplo, pasé el día con mi hija en el estudio de grabación de Roberto. Disfrutamos muchísimo aprendiendo sobre procesos creativos y composición de temas musicales.
Esclerosis múltiple
Roberto tiene su estudio en casa y es que desde hace años, una esclerosis múltiple le tiene atrapado en una silla especial porque su movilidad es muy limitada. La enfermedad ya no le permite utilizar su mano izquierda, pero con la derecha, sus pies y la inteligencia de su cabeza, hace milagros con el teclado de su ordenador y los botones que hay de su mesa de trabajo.
Roberto tiene un sentido del humor invencible. Todo el rato bromea con perspicacia universal (aunque él es argentino)
Después de varias horas, me despido de él sin necesidad de que me acompañe hasta la puerta porque eso es una convención innecesaria para nosotros.
Mientras agarro la manilla, le miro y le grito:
¡No olvides ponerte las rodilleras y el casco cuando salgas a la calle a patinar!
y nos reímos con complicidad.
Disfruta del día.