En mi paseo matutino de hoy, reflexiono sobre los beneficios que supone inspirarse profesional o personalmente en metodologías o formas de hacer que sean eficaces.
Inspirarse en lo mejor es muy recomendable.
Y me refiero a algo distinto al plagio. Este es otro tema que requeriría un post especial.
También comparto contigo dos anécdotas entrañables, que sirven quizás para.ilustrar en parte, el tema de hoy:
? Una hace referencia al ámbito deportivo (54D) igual ya has oído hablar de ellos. Trata de dos chicos mexicanos asentados en Miami, que han adquirido prestigio y fama internacional durante el confinamiento, por compartir gratuitamente y cada día, una metodología propia de ejercicios para hacer en casa. Lo cierto es que son brillantes en lo suyo y además,tienen “carisma”.
? Y la otra anécdota, tiene que ver con un consejo que me dio un cliente que tuve hace años. En aquellos tiempos, mi cliente trabajaba en Eroski. Fue alguien de quien aprendí lo no escrito. Un mentor en muchos aspectos.
Aún mantenemos nuestra amistad. Gracias Ricardo Oleaga Barruetabeña por los consejos que me dabas en aquellos mis inicios profesionales.
Disfruta del día y del paisaje de hoy con Miami Beach al fondo:
Hola, aquí estoy en mi paseo matutino. Un día más caminando por la vida en este lugar maravilloso que hoy te voy a volver a enseñar. En alguna ocasión lo he hecho, pero es que hace tanto que no venía por aquí que quiero que lo veas. ¡Qué delicia!.
Hoy venía con ganas de compartir te una anécdota. En este confinamiento, han salido unos tíos de en Miami que tienen un gimnasio que se llama 54. Existe en España. Son unos chicos mexicanos que han tenido muchísimo éxito en redes, sobre todo en Instagram, porque han hecho durante el confinamiento una serie de ejercicios gratis para quien quisiera seguirles desde casa. En mi familia hemos estado todos abducidos por estos chicos.
Él es un tipo muy simpático, uno de ellos que además ha sido jugador de fútbol profesional, hablaba el otro día de que le estaban copiando lo que hacía.
Mucha gente que se quejaba y les decía que les estaban copiando los ejercicios porque ha tenido mucho éxito. Me encantó lo que dijo: Es bueno que estén inspirando a otros profesores y otros deportistas para copiar sus propios ejercicios y difundirlos en la red o en sus gimnasios.
Y me encantó porque él decía que eso era bueno. Voy a contribuir a que la gente tuviera hábitos más saludables que consiguiera crecer.
Hay una serie de explicaciones en el contexto deportivo, incluso humano, y a mí me recordó a una anécdota que me pasó hace muchísimos años cuando yo empezaba a trabajar con un
cliente mío. Mi amigo Ricardo que le quiero mucho y tengo mucha relación con él. Entonces, él trabajaba en Eroski y aprendí mucho con él.
Alguien nos había copiado una investigación que habíamos hecho, y la metodología, y alguna
empresa nos había copiado y, entonces, lejos de estar triste y enfadado me dijo:
“Ignacio qué suerte tenemos que una empresa de este prestigio haya querido copiarnos nuestra propia metodología. Esto es señal de que estamos haciendo algo muy bien.”
Acuérdate que copiar está mal, pero copiar lo bueno no es lo mismo. Hay que inspirarse en lo que está bien, en lo que es bueno.
Me encantó esa reflexión en el plano profesional y en en el plano personal. Es bueno que haya gente que nos inspira y que nos permita hacer lo que ellos hacen. A mí me ha pasado con mis
propios paseos matutinos que estoy haciendo, hay gente que me está imitando, que me está copiando y me pasa lo mismo. Pues qué bien ¿no? Qué gozada que si eso contribuye a que alguien aporte valor, a que alguien disfrute viendo paisajes bonitos a mí me parece fantástico.
Yo creo que me quedo con esa frase de este cliente amigo mío:
Copiar pero copiar siempre lo bueno.
Nada más, solamente compartir esta reflexión desde este paraíso que tenemos aquí: Miami al fondo.
Cuídate mucho que tengas un gran día.