Me dicen en LinkedIN, que he alcanzado los 48.162 seguidores.
Entonces me he auscultado mi Ego, para comprobar que todo estaba en su sitio y no se habían producido fallas por el ¿logro?
De momento, sigo con los pies en la Tierra. ?
Mantengo la estima justa y necesaria para gobernarme por la vida, con la normalidad que requieren las buenos valores y sin los aires de grandeza que aparecen tras las conquistas. ?
Al Ego hay que vigilarlo y tenerlo a raya.
Sobrestimarse, solo sirve para elevarnos y perder la distancia que nos separa del suelo.
A veces, en mis viajes, hay personas que me reconocen en los aeropuertos, hoteles… y me preguntan si soy Ignacio Isusi, el de Linkedin.
Cuando sucede en presencia de mis hijas, me toman el pelo y me advierten con cara seria: «Papá: que no se te suba la fama a la cabeza ¿eh?», y luego se tronchan de la risa.
Entonces, evoco esa maravillosa frase que se atribuye al emperador estoico Marco Aurelio y que un esclavo susurraba a los generales, (al regresar victoriosos de sus campañas en el extranjero) cuando recorrían las calles de Roma, mientras sostenía sobre su cabeza, una corona de Laurel:
«Mira atrás y recuerda que solo eres un hombre (y no un Dios)».
Disfruta de tu día