Me he ido a lavar las manos y he visto que el jabón se había terminado. Así que me pongo a buscar desesperado entre los cajones del baño…Y por casualidad, me encuentro con esta pastilla de jabón, que me regaló hace años mi amigo Juan Jesús Alegría Alonso.
Es un emprendedor de los buenos y un ser humano maravilloso. Siempre dispuesto a ayudar a quien de verdad lo necesita. Y lo mejor de todo, siempre con buen humor.
Debe ser por su apellido. ?
¡Qué bonito apellidarse ALEGRÍA!
Y quizás también porque aunque sigue siendo un hombre joven, hace años tuvo una operación a corazón abierto, en el que se jugó la vida.
Pensaba ahora que, seguramente, aprendió mucho de aquella experiencia. También a comprender, desde la incondicional alegría con la que gobierna su vida, que “¡todo es posible!”.
Como lo fue salir vivito y coleando de su grave intervención. Ahora el corazón le ruge como un fórmula 1 ? (no es broma)
Mi amigo ha experimentado que en el viaje a Ítaca, la actitud positiva y el esfuerzo, son claves para alcanzar nuestros propósitos.
Que le pregunten a él que nació en un pueblo pequeñito de Álava, Pipaón, y hoy lidera un compañía internacional de comunicación espectacular.
Te quiero mucho amigo.
Disfruta del día