Y pienso que si hay un sentimiento que ha ido floreciendo a lo largo de todos estos años, es el de agradecimiento.
Me siento agradecido por todo lo que ha sucedido en mi vida: lo bueno y también lo malo.
He entendido que todo lo acontecido era perfecto y necesario para llegar a convertirme en quien hoy estoy siendo.
Cuando lo pienso, siento mucha paz y consuelo. Porque todo cobra un sentido mágico. Fracaso y éxito: dos caras de una misma moneda valiosa, muy valiosa.
Así que quiero dar las gracias a todos quienes directa o indirectamente formáis o habéis formado parte de mi vida. También a ti que me lees.
Y recuerdo ahora que en las cartas a los Reyes Magos que escribía de niño, después de finalizar mi lista de regalos, pedía perdón por los errores cometidos y prometía ser mejor persona en adelante.
Luego solía pedir paz y amor en el mundo y regalos para los niños pobres.
Hoy, sin lista de regalos en mi mente, sin embargo, siguen vivos y con la misma vigencia aquellos otros deseos infantiles.
Ah!! Y mi rey preferido era y es Melchor. ⭐️😀
Disfruta del día