Y de pronto dice mi hija: “es tu alma papá”. Yo me sonreí y dije “¡qué pequeñita!” ?
Ayer escuché que cuando crecemos emocionalmente, nuestra alma se va llenando de paz, poco a poco. Y que las personas que se muestran muy positivas todo el rato, en realidad, al igual que sucede con las que son muy negativas, tienen el alma agitada.
Desde luego, tiene todo el sentido, esta afirmación. Quizás el alma necesita ser neutral para vivirse en plenitud.
Hay quienes piensan que soy una persona muy positiva. Yo no lo diría de mí. Siempre me he vivido con cierta turbulencia interior.
Aunque hace tiempo que lo he aceptado con serenidad. He comprendido que tengo mucho margen de maniobra para seguir creciendo ?. Lo cual me anima y me consúela porque significa que queda camino para poder resolver inconformidades.
Otra cosa es que cuando hablo por aquí, trato de ser amable con mis palabras y contenidos. Que no son sino el resultado de intentar aprender a transformar mis tempestades interiores, en océanos y paisajes emocionales en calma. Y así quien quiera, se pueda quedar a descansar en esa parte de mi alma:
la que vive en paz.??
Disfruta del día
