A pesar de que tradicionalmente pareciera haberse instalado culturalmente la necesidad de conceder más importancia al hablar que al escuchar (emisor-mensaje-receptor), es la escucha la que valida el habla.
Y me gusta decir que cuando escuchamos, es importante atender a lo que se dice sin olvidar escuchar también, lo que no se dice. En mi paseo matutino de hoy reflexiono sobre ello. Espero que te resulte de alguna utilidad. Disfruta del díaMOSTRAR MENOS