Así que cuando tengas dudas al respecto sobre tu persona y te preguntes “¿quién soy?, puedes acercarte al dicho:
“dime con quien andas y te diré quién eres”.
Por aquí puedes encontrar interesantes respuestas.
Aunque es verdad que frases hay muchas, ésta suele ser bastante ecuánime con nuestra realidad.
Puede suceder incluso, que ahora mismo, estés evaluando tu situación y poniendo rostro a esas personas que están en tu vida. Y de alguna forma, adivinas que “necesitas mejorar” 😂. Siempre hay margen para crecer.
Entonces, quizás sea el momento de integrar en nuestra vida personas que nos inspiren y nos ayuden a convertirnos en mejores seres humanos. Solo hay que observar con atención y lanzarse a la búsqueda de estas personas que transmiten la mejor energía.
Esas personas especiales que nos llenan de espíritu no son difíciles de reconocer. Son humanos que desprenden una luz especial y por alguna razón, siempre quieres estar con ellas.
Por la otra parte, también va bien reflexionar sobre si tenemos al enemigo dentro de nuestra propia vida. Suelen ser personas que lejos de sumar, restan y no aportan nada extraordinario a nuestra existencia. A veces solo frivolidad y malos sentimientos.
Rodearse de buenas personas permite que nuestras vidas sean más amables y enriquecedoras. Así de sencillo.
Disfruta del día